Mascarillas y colegio, lo que tenemos que saber.
Con la llegada del colegio nos asaltan muchas dudas. Una de las principales incógnitas es el uso de las mascarillas. Por suerte el 31 de agosto Dña Beatriz García Fernández y Dña Marta Álvarez publicaron en la revista NIUS , con la colaboración de dos pediatras, un médico preventivista y un farmacéutico, un excelente artículo que nos aclara muchas cosas.
A continuación lo reproducimos.
En unas semanas los niños de toda España empezarán, si nada cambia, los colegios. Y a partir de los seis años lo harán con mascarilla. Así que a los libros, mochilas, ropa y demás material escolar se une este septiembre la compra de mascarillas -los que no tengan ya- y con ellas, las dudas: ¿qué mascarilla le pongo al niño? ¿Cuántas necesita para cada día? ¿Cómo le enseño a ponérselas?
¿Qué tipo de mascarilla debe llevar mi hijo al cole?
Alberto Torres, médico preventivista miembro de la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene (SEMPSPH) explica el propósito de la obligatoriedad de las mascarillas: «Lo que necesitamos es una protección respiratoria que impida que las gotas que producimos al hablar, o al cantar, salgan fuera, porque en esas gotas viaja el virus». La conclusión es fácil: si ninguno de los niños expulsa al exterior gotas donde pueda alojarse el virus, no habrá virus en el ambiente para contagiar.
Las mascarillas higiénicas homologadas son las recomendadas para el colegio: han demostrado su eficacia ante las autoridades europeas, son más económicas y dejan respirar a los niños
La Sociedad Española de Salud Pública recomienda, en su página web, el uso de mascarillas caseras o sin etiqueta «cuando no se tenga acceso a una homologada». Y ésas precisamente, las homologadas, son las que recomiendan la mayoría de los expertos. Las mascarillas homologadas han demostrado su eficacia, mientras que otras no.
Lo opina Fernando Cansino, vocal del Colegio de Farmacéuticos de Sevilla: «No sirve cualquiera. Tiene que ser una mascarilla homologada y que cumpla la normativa, para que realmente evite que se expulsen fluidos al exterior».
Las mascarillas de tela, reutilizables, que cumplen la normativa deben especificar en la etiqueta que cumplen la norma UNE 0065
Dentro de las mascarillas homologadas, hay varios tipos:
1.- quirúrgicas: las que vemos en el ámbito sanitario. Suelen ser de un solo uso, y se pueden usar ocho horas seguidas. Evitan que el portador expela gotas al exterior.
2.-higiénicas: éstas también evitan que se expulsen gotículas, y son las ideales para ir al colegio. Pueden ser desechables o reutilizables. En el siguiente punto NIUS explica en concreto cuáles son y en qué fijarse cuando se compren.
3.-sistemas de protección: son los que filtran no sólo de dentro hacia afuera sino de afuera hacia dentro. Es decir, que evitan que las gotas penetren en el portador. Son más incómodas porque con ellas se respira peor y no suelen estar aconsejadas para niños sanos.
En definitiva, las higiénicas son suficientes para evitar la transmisión masiva de virus en el colegio, son las más económicas -y hay que tener en cuenta que se necesitarán bastantes- y las que permiten mejor respiración a los niños.
¿En qué fijarse al comprar la mascarilla?
En mayo el Gobierno publicó una guía sobre mascarillas que contiene especificaciones sobre las mascarillas higiénicas reutilizables, que son en definitiva las de tela. Toda la información de esta guía la tienes pinchando en ESTE ENLACE
Así, la eficacia de este tipo de mascarillas es:
Desechables (las de un solo uso): filtran el 95% de las partículas de unas 3,0 micras de tamaño.
Reutilizables (las de tela): filtran el 90% de las partículas de 3 micras.
Hay que tener en cuenta que estas mascarillas no evitan que el nuevo coronavirus las traspase de fuera hacia dentro (no evitan nuestro propio contagio), pero sí consiguen el objetivo social que se pretende con la obligatoriedad de las mascarillas: evitar que expulsemos fluidos donde pueda viajar el coronavirus. De esta forma, si todos los niños la llevan, apenas habrá virus circulando en el ambiente. Y las posibilidades de que se contagien disminuyen exponencialmente.
¿Cuántas horas pueden llevarlas?
Según el ministerio de Sanidad, las mascarillas higiénicas, ya sean desechables o de tela, deben cambiarse a las cuatro horas de uso. Pasado ese tiempo no se ha comprobado su eficacia. Hay que tener en cuenta que las mascarillas higiénicas se mojan, humedecen o manchan y pueden perder propiedades. De este modo, cada niño necesitará, al menos, dos mascarillas por día.
Por eso, según el preventivista Alberto Torres podría ser recomendable «que se lleven en la mochila una segunda mascarilla y después de comer o a mitad de la jornada se la cambien». El médico recuerda que hay que decirle a los niños que la mascarilla no se debe quitar nada más que para comer o beber.
El farmacéutico Fernando Cansino explica que no se debe quitar la mascarilla al ir al baño, aunque el niño esté solo: «son zonas poco ventiladas, con excrementos y por las que pasa mucha gente»
¿Dónde deben guardar las macarillas?
En una bolsa de tela. Torres explica que lo ideal para guardar las mascarillas es una bolsa de tela, ya que «el plástico no transpira y puede favorecer que aparezcan bacterias». «Si la bolsa es solamente para quitarse la mascarilla y al llegar a casa lavarla sí se podría usar el plástico, pero lo ideal, por si se tiene que volver a usar la mascarilla, es conservarlas en tela».
¿Cómo lavar las mascarillas higiénicas de tela?
Bastará con un ciclo normal de agua fría en la lavadora. Aunque al principio de la pandemia se habló de que había que lavar la ropa sucia a 60º porque es la temperatura a la que se inactiva el virus, el preventivista Torres explica que no es necesario. «Con el detergente de lavadora es suficiente. Sabemos que el agua caliente elimina los virus, pero este virus en concreto tiene una cobertura lipídica que el jabón elimina. Además los detergentes de lavadora tienen unas propiedades de limpieza y eliminación de bacterias que los hace muy eficaces incluso en agua fría».
Cuidado al marcar las mascarillas
Todo el que tiene hijos sabe que los objetos en los que no se pone el nombre del niño puede terminar extraviados, ya que los profesores no pueden saber a quién pertenece la cosa en cuestión. Por eso es importante que las mascarillas, que son de uso personal e intransferible, tengan puesto el nombre del alumno. Pero no se debe coser, porque agujerear la tela puede alterar la eficacia.
Por eso el farmacéutico Fernando Cansino recomienda usar pegatinas, o marcadores de tinta que no traspasen la tela de la mascarilla (se pueden colocar en etiquetas, o en las tiras). El experto recomienda «usar una pegatina, en ningún caso utilizar un rotulador directamente sobre la mascarilla ya que podría humedecerla y perder la eficacia filtrante en esa zona. También hay que evitar pinchar o perforarla».
Enseñarles a usarlas en casa
Los niños tienden a tocarlo todo, y si deben cambiarse la mascarilla a mitad de la jornada es importante que sepan hacerlo bien. Margarita Rojas, del servicio de Pediatría del Hospital Quirón Salud de Marbella (Málaga), propone «utilizar un peluche grande que nos sirva como modelo para practicar, o colocarles delante de un espejo e irles indicando cómo auto colocársela, de forma que vayan viéndolo reflejado».
Ahonda en la idea Quique Bassat, coordinador del Grupo de Escolarización de la Asociación Española de Pediatría y epidemiólogo de ISGlobal: «lo tenemos que plantear como un juego. La primera vez podemos usar un muñeco de ejemplo, pero lo importante es que el niño sepa ponérsela a sí mismo, que pruebe delante de un espejo». El pediatra insiste, sin embargo, en el poder del ejemplo. «Lo que mejor funciona es el modelo del adulto. Es decir, que el niño vea que el adulto la usa y cómo se la pone y lo imitará», dice.
Rojas y Bassat recomiendan a los padres que se fijen mucho en el ajuste de la mascarilla. La primera de las médicos infantiles afirma que lo importante es que «le quede bien ajustada tapando nariz y boca y que sea de su tamaño», y el segundo recomienda «que se prueben varios modelos de las homologadas y se queden con el que les resulte más cómodo. Lo importante es que están cómodos y la manipulen lo menos posible».
Recordatorio: lo primordial es usarlas siempre
El preventivista Alberto Torres termina la conversación con NIUS insistiendo en una idea: usar la mascarilla. Más allá de cuál es la mejor, «lo importante, importante, importante de verdad es que los niños lleven la mascarilla en el colegio».
Considera el experto que el mejor sistema para evitar la propagación del virus es el que se usa mucho: «que sea cómoda, que les cubra toda la cara, que se les ajuste bien a la cara. Insistirle en que la lleve todo el tiempo y que si huele o está mojada se la cambien». Será la mejor manera de que haya menos virus en el ambiente y nuestros hijos se contagien menos. Con estas prevenciones y un poco de suerte, puede que nos libremos incluso de las gastroenteritis, catarros y demás enfermedades que afectan a los niños cada curso escolar.